El 19 de noviembre de 1934 voló por primera vez el Loire 130, un hidroavión diseñado para su utilización a bordo de los navíos de línea de la marina francesa. El diseño fue el ganador de un concurso al que se presentaron otros cinco constructores franceses. El Loire 130 demostró buenas características y se lanzó su producción en 1937. Al año siguiente entró en servicio a bordo de los principales buques de guerra franceses. En total se fabricaron 125 unidades.
EL portahidros Comandante Teste, sobrevolado por un Loire 130.
Este hidroavión se distinguía de sus homólogos en otras flotas al utilizar su propio fuselaje en flotación. Montaba un motor propulsor Hispano Suiza en posición elevada para protegerlo del agua. Este aparato era bastante grande, con espacio para una tripulación de tres y 4 pasajeros, por lo que fue muy utilizado en tareas de enlace entre los buques y sus bases.
El Loire 130 también fue enviado para operar en las colonias. Ocho de ellos lo hicieron en la Indochina francesa, durante la guerra contra Tailandia, realizando misiones de reconocimiento y enlace. El avión se mantuvo en servicio durante la segunda guerra mundial, donde el gobierno de Vichy lo mantuvo en misiones de segunda línea. Los últimos fueron retirados en 1950.