CAballería Mongól.
El 8 de enero de 1935 varias decenas de soldados a caballo mongoles cruzan la frontera con Manchukuo, y se enzarzan en combate con una unidad de patrulla del ejército de Manchukuo, que incluye un “asesor” japonés, que muere en el subsiguiente enfrentamiento. Se conoce como el “incidente de Halhamiao”, al ocurrir cerca del santuario con ese nombre, y provoca la respuesta japonesa, enviando más tropas, y una escalada del conflicto.
Desde finales del siglo XIX, los enfrentamientos entre Japón y Rusia, luego Unión Soviética, habían sido constantes por motivos de control del territorio. Durante la primera mitad del siglo XX esta guerra de baja intensidad se intensificó al ocupar Japón extensas partes de China y crear el estado títere de Manchukuo, formado por las tres provincias de Manchuria, que mantenía una extensa frontera con la URSS y Mongolia.
Ejército de Kwantung.
Entre 1932 y 1934 se registraron 151 incidentes, 150, solo en 1935, y a partir de ahí se agravan hasta desembocar en la batalla de Lago Kashan en 1938 y el conflicto del Khalkin Gol en 1939 (mas información: https://shapingupfutures.net/2019/09/16/alto-el-fuego-en-el-khalkhol-gol/). Manchukuo seguiría siendo un estado títere japonés hasta el final de la segunda guerra mundial, cuando quedó englobada en China.
Caballería nipona.
Las implicaciones tanto para soviéticos, como para los japoneses fueron importantes. Stalin se vio obligado a mantener un importante número de tropas en su frontera oriental, a pesar de los reveses que estaba sufriendo a manos de los alemanes en Europa, por temor a una invasión nipona. Por su parte, Japón comenzó a desviar su atención e esta zona, en la que había sufrido un desgaste importante, y extender su hegemonía hacia el Pacífico y el Sudeste Asiático, llevando al enfrentamiento directo con Estados Unidos.